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¿Te diriges a la montaña y te preguntas cuántas cadenas de nieve debes instalar en tu vehículo? Entre la nieve y el hielo, las carreteras pueden convertirse en pistas de riesgo, que requieren el equipamiento adecuado para utilizarlas con seguridad.
Las cadenas para la nieve, por ejemplo, son esenciales para mejorar el agarre de los neumáticos en estas superficies resbaladizas. Pero, ¿cuántas necesitas realmente para garantizar tu seguridad en la carretera: dos o cuatro? ¿Cómo determinar qué modelo es el adecuado para su vehículo y cómo instalarlas eficazmente?
Este artículo pretende aclarar estos puntos y darte algunos consejos para manejar las cadenas de nieve con soltura. Descubra que, a pesar de las apariencias, el uso de cadenas no es tan complejo y que pueden contribuir en gran medida a su seguridad en invierno.
¿Cuándo hay que poner cadenas para la nieve?
Las cadenas para la nieve son obligatorias en las zonas marcadas con una señal azul que muestra una rueda rodeada por una cadena. Esta señal estipula que debe colocar cadenas de nieve en al menos dos de las ruedas motrices de su vehículo, so pena de una multa de 135 euros.
También es aconsejable utilizar cadenas de nieve cuando la carretera está nevada o helada, aunque no haya señales, para evitar perder el control del vehículo o quedarse atascado.
El principal objetivo de las cadenas de nieve es aumentar la adherencia de los neumáticos de nieve sobre superficies nevadas o heladas creando puntos de adherencia entre el neumático y la carretera.
Reducen la distancia de frenado, mejoran la maniobrabilidad y la estabilidad del vehículo y facilitan las arrancadas y las subidas.
Por tanto, el uso de cadenas para la nieve es esencial para garantizar su seguridad y la de los demás usuarios de la carretera.
¿Cuántas cadenas de nieve necesito?
Equipar las ruedas motrices de su vehículo con dos cadenas para la nieve es una forma asequible, rápida y eficaz de mejorar la adherencia sobre nieve y hielo, cumpliendo al mismo tiempo la legislación vigente.
Sin embargo, esta opción puede comprometer la estabilidad, el frenado y la adherencia. Equipar sólo dos ruedas puede desequilibrar el vehículo y aumentar el riesgo de perder el control o sufrir un accidente.
Instalar cadenas de nieve en las cuatro ruedas es la solución ideal para maximizar la seguridad, las prestaciones y el confort.
Proporciona una excelente tracción, reduce el riesgo de derrape y pérdida de control, y mejora significativamente la maniobrabilidad, el frenado y la dirección.
Sin embargo, este método requiere un presupuesto más elevado (compra de dos pares de cadenas), lleva más tiempo colocarlo y quitarlo, y aumenta el peso del vehículo, lo que puede repercutir en el consumo de combustible y el rendimiento.
Los profesionales y los fabricantes tienden a preferir la instalación de cuatro cadenas de nieve para optimizar la seguridad y la maniobrabilidad. No obstante, admiten que dos cadenas pueden ser suficientes en algunos casos, siempre que se tomen ciertas precauciones.
Es esencial elegir cadenas compatibles con el tipo de vehículo y de neumáticos, y no superar una velocidad de 50 km/h con cadenas de nieve.
Evita circular por carreteras no cubiertas de nieve para no dañar el vehículo o el asfalto, y comprueba regularmente la tensión de las cadenas y reajústalas si es necesario.
Consejos prácticos para un uso óptimo
Elegir el tipo adecuado de cadenas para la nieve e instalarlas correctamente es esencial para conducir con seguridad. Aquí tienes algunos consejos útiles para elegir las cadenas adecuadas e instalarlas en tu vehículo sin dificultad.
¿Cómo elegir el tipo de cadenas adecuado?
Las cadenas para la nieve varían en cuanto a modelo, forma, sistema de fijación y precio. Es fundamental elegir cadenas compatibles con las características de su vehículo y sus neumáticos para garantizar su eficacia y evitar dañar su vehículo.
- Dimensiones de los neumáticos: Identifique la anchura, la altura y el diámetro de sus neumáticos, tal y como se indica en el flanco del neumático, para elegir el tamaño de cadena adecuado;
- Tipo de vehículo: Determine si su vehículo es de tracción delantera o trasera, e instale las cadenas en las ruedas motrices adecuadas. Ten en cuenta también los sistemas electrónicos como el ABS o el ESP, que pueden afectar al uso de las cadenas.
- Tipo de cadena: En función de tus necesidades (frecuencia, duración, dificultad del trayecto), puedes elegir entre cadenas metálicas, textiles o de araña, cada una con sus propias características.
Pasos clave para instalar correctamente las cadenas para la nieve
Siga estos pasos para instalar eficazmente sus cadenas para la nieve:
- Busque un lugar seguro, aparque y retire el equipo de montaje;
- Prepare las cadenas, extiéndalas y desenróllelas junto a las ruedas a instalar;
- Coloca las cadenas detrás de la rueda y pásalas por encima de la rueda sin tocar la carrocería ni los componentes mecánicos;
- Coloca las cadenas siguiendo las instrucciones del fabricante para que se ajusten correctamente al neumático;
- Ajuste la tensión, utilice tensores para las cadenas manuales o deje que las cadenas automáticas se ajusten a medida que circula;
- Compruebe el montaje para asegurarse de que las cadenas están correctamente colocadas y ajustadas antes de salir;
- Conduzca con precaución, evite superar los 50 km/h y compruebe regularmente el estado de las cadenas;
- Después del uso, desmonte las cadenas de acuerdo con el procedimiento, límpielas y guárdelas adecuadamente.
Consejos para conducir con cadenas de nieve
Conducir con cadenas para la nieve significa adaptar tu estilo de conducción:
- No superes los 50 km/h y adapta tu velocidad a las condiciones de la carretera;
- Anticipe sus acciones: frene, acelere y cambie de dirección con suavidad;
- Comprueba regularmente el estado y la posición de las cadenas para garantizar su eficacia y tu seguridad;
- Adapta tu conducción a las condiciones de la carretera y quita las cadenas si la carretera está despejada.
Las cadenas para la nieve son esenciales para una conducción segura en carreteras nevadas o heladas. Aumentan la tracción de los neumáticos en superficies resbaladizas, reduciendo el riesgo de derrapar o perder el control del vehículo. Por último, es esencial conducir despacio y con cuidado, según las condiciones de la carretera.